Hace ya dos años que Un trabajo inesperado se publicó y, tras este, el universo que había empezado a entreverse con unas simples definiciones en la parte de atrás del libro ha ido creciendo y evolucionando con La sombra de los Elegidos , plasmando el pasado de la galaxia y los orígenes del Gobierno Galáctico , la comunidad económica y política más grande de la nebulosa. (Solo habrá que esperar un poco más para que todos os podáis sumergir en sus páginas y lo descubráis por vosotros mismos ).
Y no solo eso, las ideas que comenté en el pasado artículo también están vinculadas a todo este universo. Puede que en un principio, si continuo con la historia de la civilización aeshan (y no pierdo la cabeza tratando de crear el argumento completo. Os recomiendo que veáis mis redes sociales para entenderlo), no comprendáis esos vínculos, pero os aseguro que estarán ahí y que todo llegará.
Pero lo importante no es hablar de futuros proyectos (no sea que hagamos algún maldito spoiler); sino explicaros cómo surgió la idea. Respondiendo a la pregunta de ¿cómo surgió toda esta locura? Y es que, como digo en el título, fue una idea inesperada; al igual que el libro.
Un día estaba leyendo los maravillosos artículos de Gabriella Campbell ( quien no haya visto su página ya sabe qué puede hacer una vez termine de leer esto ) y me topé con un artículo sobre “ Cómo escribir un cuento a la semana ”. Cómo os podéis figurar, me gustó el reto de escribir un relato semanal y ver qué podía salir (en aquella época aún disponía de tiempo en abundancia). Estuve cumpliendo los plazos y cada semana producía un nuevo relato (hasta que llegaron nuevas responsabilidades); pero hubo buenos resultados y algunos los podéis leer en las Antología de relatos: Las hojas perdidas o en el libro Un trabajo inesperado .
¡Así es! Este libro de ciencia ficción nació como un mero relato, uno cuya idea original fueron solo cuatro palabras: Piloto espacial; antiguo soldado. Tras aquella primera semana decidí no abandonar a Vhan, Ges y Tidux a su suerte y acompañarlos en una aventura que había surgido de manera inesperada. A medida que los días pasaban y la historia tomaba más forma comenzaron a surgir las diferentes razas y planetas: Rhesa , la estación de Lardalan , la Federación de Comercio y Transporte , los mushons y las demás razas, el Gobierno Galáctico , la ciencia galáctica y el alinum ; pieza fundamental de toda la historia.
De esta manera, sin quererlo ni beberlo me topé con algo que tenía su propia consistencia. Un marco donde ordenar todas mis ideas; un lugar que crece con cada nueva idea y donde puedo crear con cada nueva palabra ( ahora hasta me dedico a crear sistemas solares para poder entender mejor cómo sería la vida en esos planetas ). Así que, ya veis cómo surgió Theia , de un relato que simplemente debía ser un reto y de cuatro simples palabras . ¿A dónde llegará? ¿Te cansarás alguna vez? Lo desconozco, pero ahora mismo quiero seguir con este viaje y conseguir, de alguna manera, llevaros también a vosotros.
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