Adictiva aventura intergaláctica
"La Sombra de los Elegidos" es una adictiva aventura intergaláctica. Una perita en dulce para todos los que somos amantes de Star Trek.
La trama se divide en dos líneas temporales. Los capítulos impares son los encargados de narrarnos el pasado de la galaxia y los acontecimientos que derivaron en la Época Oscura. Mientras que, en los capítulos pares, se nos narra la historia de Grundry Glädlet,una celebridad en robótica avanzada que, a través de lo que él mismo vive, nos desvelará cómo quedó la galaxia y las restricciones existentes tras la Época Oscura.
El estilo del autor me ha gustado bastante; es fluido y correcto. Ha sabido crear un mundo literario perfecto, con multitud de criaturas dispares e interesantes.
Una ciencia ficción más pura
Estamos ante una novela de ciencia ficción, género al que sabéis que me estoy aficionando, aunque a veces todavía me cuesta meterme en sus dinámicas, sobre todo cuando nos encontramos con una ciencia ficción más pura, como puede ser esta novela.
No hay nada que nos recuerde a la Tierra (es más los humanos apenas aparecen y solo como algo anecdótico) por lo que me ha costado bastante entrar en la historia con todos los nombres de las razas y de las guerras y de su tecnología.
Lo bueno es que en este caso el autor ha pensado en que esto podía ser un problema para los lectores y al final se ha incluido una pequeña guía donde se explican muchas de estas cosas que pueden llegar a resultare confusas y abrumadoras.
Si os gusta la ciencia ficción será un libro que os guste y os sorprenda.
Hace 7000 años una guerra contra los Elegidos acaba con casi toda la vida de Theia. Esa época será horrible y será llamada la Época Oscura. Muchos héroes murieron para poder crear el Gobierno Galáctico que llevará la estabilidad a la galaxia.
Grundry Glädlet, un experto en robótica avanzada, es llamado junto con otros especialistas para investigar una señal misteriosa que puede volver a poner en peligro todo el reino.
Para comenzar, es un libro con una edición muy bonita y cuidada. Me han encantado las ilustraciones que nos acompañan durante el libro. Los capítulos son larguitos, pero no se hace muy pesado porque toda es bastante blanco y con espacios, lo que deja tiempo a pensar y respirar.